Tras una década de pocos logros, en la década de 1970, el Athletic volvió a la senda de los éxitos. Su apodo es tiburón, el cual se debe a su lugar de origen vinculado al mar y a su gran mentalidad que los ha ayudado a conseguir sus éxitos. Aplaude el Bernabéu a Ceballos tras una buena acción defensiva. El equipo recibe además una réplica del trofeo y su nombre es grabado en la base de la original.